¿Sabes qué es un Enganche PsicoEmocional?



¿Cuántas veces has participado en un pleito por metiche?

¿Cuántas veces has estado en un conflicto con alguien solo porque no te cae bien?

¿Has observado que en algunas ocasiones una misma conducta en dos personas diferentes te produce o genera emociones diferentes?

¿Has justificado alguna conducta incorrecta en un ser querido pero la señalas, juzgas y enjuicias en alguien que no te es agradable?

¿Qué tanto padeces o sufres eso llamado enganche psicoemocional?

¿Pero, qué es un enganche psicoemocional? No, no me refiero a la codependencia emocional de una pareja o de padres e hijos.

En este caso estoy hablando de esa perturbación en la mente, esa emoción, de ese sentimiento negativo, ese malestar, cuando alguien no nos cae bien y todo lo que hace nos parece mal, incluso cuando ni siquiera debe entrar en algún tema, tendemos a meter el nombre de la persona, por el simple hecho de que no es un personaje que nos agrada.

En el trabajo es común que se den estos enganches psicoemocionales.

Les platicare algunos ejemplos para aclararles el tema, por supuesto los nombres son ficticios pero los personajes que representan son muy reales, de carne y hueso y les corre sangre por las venas (bueno eso creo).



1) Son dos directivos Pablo y Mónica. Los cuales trabajan juntos desde hace dos años, pero por historias de sus vidas pasadas a Mónica no le agrada mucho Pablo y viceversa, ya que se conocieron en otro ámbito antes de trabajar para esta empresa, se lleva a cabo una reunión en la que él no se encuentra y en la que se está tratando un tema completamente ajeno a las labores de Pablo, de pronto ella saca a colación un comportamiento de Pablo, todos los demás presentes se miran y uno se atreve a preguntar ¿Y qué tiene que ver Pablo en esto? Ella no se ha dado cuenta que le desagrada tanto Pablo que tiene un enganche emocional con él y solo ve lo malo de su conducta.

2) Ángel y Bulmaro son dos compañeros que laboran en el mismo departamento, ambos no se llevan bien, una vez sucedió un conflicto uno le echó la culpa al otro y viceversa, cuando se averiguó acerca del incidente resulta que ninguno tuvo nada que ver en dicho conflicto, que el culpable fue otro compañero.

Estos son ejemplos, de los enganches psicoemocionales que generan conflicto, cuando crees que alguien solo quiere perjudicarte sin una razón de peso y vives defendiéndote y al contraataque, cuando por alguna extraña razón esa persona no te agrada, cuando esa persona te recuerda a otra persona que en el pasado te hizo algún daño o con quien tuviste un conflicto, cuando esa persona es pariente o familiar con alguien con quien tuviste un conflicto y esta persona que no tiene nada que ver, simple y sencillamente por tener algún parentesco ya también te desagrada.

¿Pero todo eso tiene solución? Se puede realizar un desenganche psicoemocional, ya que la verdad no es muy agradable estar en esa situación y generar esas emociones negativas. La respuesta es: Si se puede. ¿Cómo?

Esto me lleva a realizar unas preguntas

1) ¿Ya reconociste que si estas enganchado? ¿Qué tanto?

2) ¿Te interesa desengancharte?

Te cuento que los ejemplos anteriormente dados, hoy por hoy, esos personajes están pasando por el proceso desenganche.

En el primer caso, un día Pablo y Mónica, asistieron a una reunión (que no era de trabajo) en la que llegaron primero y no les quedó más remedio que platicar, lo interesante es que como no hablaron de trabajo su plática derivo en sus nietos y de pronto descubrieron que tenían en común el amor hacia sus respectivos nietos, las aventuras que vivían con ellos, las emociones que eso pequeños les hacían sentir, contarse que estaban viviendo cosas que no vivieron con sus propios hijos por haberse dedicado a trabajar y de allí se limaron un poco las asperezas y ha disminuido la animadversión mutua, hoy por hoy las juntas de trabajo son más tranquilas y Mónica ya no hace referencia a el en ningun momento.

En el segundo caso a finales del año Bulmaro se armó de valor y le dijo a Ángel que él se había hecho un propósito de año nuevo y se lo quería compartir, le solicitó llevar la fiesta en paz, ayudarse mutuamente y hablar antes de enojarse si tuvieran algún problema, por lo pronto él se comprometía a respirar profundo, contar hasta donde fuera necesario para no enojarse y tratar las cosas de manera civilizada ya que reconocía que era un fosforito, al día de hoy llevan ya casi dos meses sin conflicto, tiempo record cuando antes no pasaba semana sin que se enfrentaran en algún conflicto.

Esos son los enganches psicoemocionales, cuando esa persona que dices que te es X, la tienes más presente de lo que quisieras y no precisamente porque la quieras, sino que más bien porque te causa un desagrado.

Si analizas muy bien muy probablemente descubras que tienes un enganche con alguien, puede ser leve o muy fuerte eso ya lo evaluaras tú mismo, lo importante es lograr destrabar ese enganche que solo produce dolores de cabeza, estrés y ansiedad.

Algunas veces descubrir las cosas que tenemos en común con otro ser humano nos hace bajar nuestras barreras y nos da la oportunidad de socializar mejor y relacionarnos de manera sana y no es que no se vaya a suscitar algún conflicto en algún momento pero sin duda será tratado de manera diferente

Y como suele suceder, alguien tiene que tomar la decisión de desengancharse, no lo sé a lo mejor esa persona debes ser tú. 


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